Hoy se cumplen 142 años de la fecha en la que Thomas Edison patentó su bombilla. Un invento que, antes de la incursión de las luces led, se mantuvo prácticamente inalterable durante décadas. Algo menos conocida es la relación de Edison y el cine.
Lo que quizás muchas personas no saben es que Edison fue el precursor del cine moderno con la invención del kinetoscopio 1897, adelantándose a los hermanos Lumière en Francia y llevando el aparato a su uso comercial. Demostrando así la estrecha relación entre Edison y el cine.
Muchas son las rarezas de uno de los más grandes inventores de la historia. Todas ellas le hacen tener un gran magnetismo aún en la actualidad. Si te interesa saber más sobre Edison y otras personas que marcaron un hito en sus respectivos sectores sigue leyendo este post.
La invención de la bombilla.
La bombilla fue uno de los inventos más revolucionarios del siglo XIX y de la historia. Posibilita la vida más lejos de la caída del sol. Este inventó permitió también el desarrollo de cientos de miles de nuevas profesiones y puestos de trabajo.
El 27 de enero de 1880, Edison inscribe la patente número 285.898 de este sistema de alumbrado que proporciona hasta 40 horas de luz. La bombilla basa su principio de funcionamiento en el arco voltaico o arco eléctrico.
Este fenómeno se produce cuando se realiza una descarga eléctrica entre dos electrodos en una atmósfera gaseosa. Con ello se crea un calentamiento y una luz, similar a la de una llama.
La dificultad en utilizar este fenómeno para el alumbrado de miles de millones de hogares y calles en todo el mundo, como al final fue, residía en encontrar un filamento de material que soportase esta descarga un tiempo suficiente para aprovecharlo como lumbre.
Como muchos otros inventores de su época, Thomas Edison empleó un filamento de carbono para ello. La diferencia entre su patente y las demás, es que él había generado el vacío en el interior de la bombilla. Esta diferencia permitía ralentizar el deterioro del filamento y proporcionar 40 horas de vida útil.
Edison siempre tuvo una gran visión comercial de todos sus inventos y sin duda este fue el carácter diferencial que le hizo tener éxito respecto a sus competidores. Su carácter comercial queda demostrado con el hecho de que también patentó el primer contador de consumo eléctrico.
Edison y el cine, paralelo a los hermanos Lumière.
El 31 de agosto de 1897, hace 119 años, Edison patentaba el kinetoscopio. Este dispositivo permitía visionar imágenes en movimiento a 40.46 fotogramas por segundo. Eso sí, de manera individual.
En 1889 el inventor empezó a interesarse por la cinematografía. En la década de 1890 la considerada primera máquina de cine empezó a utilizarse con carácter comercial.
Estas máquinas se popularizaron en Nueva York a finales de la década. Con una moneda de 5 centavos se podían ver películas de unos veinte segundos: bailes, payasos, recreaciones de sucesos históricos, números de magia, musicales.
También creó el kinetófono, antecesor del cine sonoro. Este aparato combina el kinetoscopio y el fonógrafo, otro de sus inventos.
Sin embargo, el mayor error comercial del kinetoscopio fue la falta de colectividad. Esta característica y necesidad del público de hacer la visualización del cine un acto colectivo fue entendida a la perfección por los hermanos Lumière. Casi de manera paralela, inventaron el cinematógrafo.
Los hermanos realizaron un espectáculo en el que se vendieron entradas el 28 de diciembre de 1895, en el Salón Indien del Gran Café de París. Allí presentaron La llegada del tren a la estación, marcando así el inicio del cine como lo entendemos ahora.
Rarezas de un inventor con mucha personalidad.
Un niño con determinación.
Thomas Edison siempre fue una mente inquieta, pero paciente y con gran capacidad de observación. A los 12 años trabajaba vendiendo periódicos y otros artículos en el tren que iba de Port Huron a Detroit.
Este trabajo le obligaba a esperar casi 12 horas para volver a su punto de origen. Tiempo que aprovechaba para leer libros de ciencia en la biblioteca de la Asociación de Jóvenes, hecho que casi con total seguridad repercutiría en su futura profesión.
Un inventor prolífico.
Thomas Edison inventó más de 1.000 inventos durante toda su vida. Su tasa de creación llegaba a un invento nuevo cada 15 días. Los más conocidos son la bombilla, y el fonógrafo, precursor del tocadiscos.
Una forma peculiar de pedir matrimonio.
Sus rarezas y peculiaridades llegaban incluso a su vida personal. Su hija, Marion Estelle Edison, contó que le propuso matrimonio a su madre, la esposa de Edison, utilizando el código morse.
Dos grandes mentes se unieron.
Uno de los mejores amigos de Thomas Edison fue Henry Ford. Ambos compartían impresiones y experiencias. Su amistad llegó hasta tal punto que Ford almacenó el último aliento de su amigo en un tubo de ensayo antes de su muerte. Una peculiar pieza que se exhibe en su museo.
Algunos precursores, inventores o creadores en nuestro catálogo.
Como lo fuera Edison, las personas con gran iniciativa siempre gozan de un gran magnetismo e interés por parte del público. Con el paso de los años, la innovación ha sido más difícil de alcazar en un mundo cada vez más sofisticado.
Muchas de estas invenciones no se basan en crear nuevos dispositivos, se basan en la reinvención y reinterpretación de elementos del día a día o artísticos. También el inventor fue un enamorado de la cultura y el arte, como lo demuestra la relación entre Edison y el cine.
En nuestro catálogo puedes encontrar algunos ejemplos como:
Antonio Ramos Espejo, el amanecer del cine en China
Antonio Ramos Espejo abrió el primer cine de China en 1907. En dos décadas había levantado el mayor imperio cinematográfico de aquel país. Esta es su insólita historia.
La Española, la de Torres
Antonio de Torres Jurado logró fama universal a mediados del siglo XIX, cambiando el modelo de construcción para las escuelas nacionales de guitarra de todo el mundo y perpetuándolo hasta nuestros días.
Cinema Novo
El filme documental se sumerge en la aventura de crear una generación de cineastas que inventó una nueva manera de hacer cine en Brasil, desde una postura política que combina el arte y la revolución. Poético ensayo cinematográfico que explora uno de los movimientos estéticos más fértiles del cine de América Latina de los años 50 y 60 a través de las reflexiones de sus principales autores, y de varios extractos de sus trabajos.
Ukamau y Ké
Ukamau Y Ké desarrolló el llamado hip hop en lengua aymara, con su lírica rebelde estremeció a la sociedad latinoamericana de inicios del siglo XXI. Murió violentamente en la cúspide de su carrera musical el mismo día en que terminaba la grabación de su segundo disco. Años después su amigo, el rapero y director ecuatoriano Andrés Ramírez, regresa a Bolivia para develar las razones de su muerte y para buscarlo a través de la temporalidad circular andina.
El misterio del rey del cinema
Maud Linder es la hija de la primera estrella del cine de todos los tiempos, Max Linder. Su padre fue conocido en todo el mundo durante la primera década del siglo pasado, fue maestro de Charles Chaplin y un pionero del arte cinematográfico, hasta caer en el olvido a mitad de los años 20. Este documental intenta desentrañar el misterio de Max y la vida de Maud.
Akelarre
La materialización de una de las grandes inquietudes del chef Pedro Subijana: la construcción de un hotel entorno a su afamado restaurante de tres estrellas Michelin, Akelarre.
La realización del proyecto supuso para el chef un verdadero problema irrealizable, que tras un inicio infructuoso, durante más de 10 años el proyecto permaneció parado. En el año 2016, el proyecto se reactivó, y tras meses de desarrollo, comenzó la construcción.
